Shabat

Génesis 2: 1-3 dice: “Entonces se completaron los cielos y la tierra junto con todo su conjunto. GD completó - en el séptimo día - Su obra que hizo, y cesó - en el séptimo día - de toda Su obra que hizo. Entonces GD bendijo el séptimo día y lo santificó, porque en él cesado de toda su obra que GD creó con el propósito de preparar ”. Desde el principio de los tiempos, GD establece tanto el significado del día como el propósito del día.  

Más tarde, con el tiempo, GD establecería, para su pueblo del pacto, pautas sobre cómo se debía observar el día. En Éxodo 20: 8, GD establece el Shabat como la cuarta de las Diez Palabras (Mandamientos) GD establece el Shabat como fundamental para la vida judía cuando ordena que “rrecuerda el Shabat y guardar es santo ”. Más adelante en Levítico 23: 3 y 4, se les dice que “Se puede trabajar durante seis días, pero el séptimo día es un Shabat de descanso solemne, una santa convocación. No debes trabajar, es un Shabat para Adonai en todas tus viviendas ".

Shabat comienza al atardecer del viernes (Erev Shabat) y concluye al atardecer de la noche de Shabat (Motzei Shabat). Es costumbre dar la bienvenida al Shabat con la casa preparada para recibir el Shabat (lavada, la comida preparada durante el Shabat, la mesa puesta, la ropa del Shabat preparada). Se encienden velas, se recita la liturgia, se cantan canciones y se comparte una comida especial con familiares y amigos. 

Havdalá

Shabat es un momento dulce en el que a menudo deseamos quedarnos. Pero cuando llega Motzei Shabat ("salir de" o después) (no antes de que tres estrellas sean visibles en el cielo) debemos pasar del tiempo sagrado a los tiempos ordinarios. Es costumbre hacer esto a través de la experiencia de Havdalá. Esta breve pero conmovedora ceremonia nos permite prepararnos mental y emocionalmente para las actividades de la próxima semana y la consiguiente anticipación del próximo Shabat.   

La ceremonia nos ayuda a reflexionar sobre la diferencia entre lo sagrado y lo cotidiano. La ceremonia de Havdalá incluye cantar varias brajot (bendiciones) de: vino en el que saboreamos la alegría del Shabat; especias, en las que reflexiona sobre la dulzura del Shabat; velas que al mirarnos las uñas a la luz recordamos la distinción entre claro y oscuro.